1, 2, 3, cadera. La bachata aterriza en la carrera del chileno que nos venía acostumbrando a la balada y el pop. Esta vez, junto a Shirel, demuestra que su interpretación pasional tiene buen sabor tanto en formato llanto en la pieza como en el folclore urbano.
El disco debut de Paco Miranda lo posicionó como una fresca voz en la balada pop, con una exploración de las juventudes actuales, los amores modernos y las disidencias sudamericanas.
Los dos años que han pasado desde Aún en mi mente no son en vano, pues el chileno apuesta a una expansión de estilos. Luego de sencillos como la acústica ‘SOLAMENTE TÚ’ y la ensoñadora pieza eléctrica ‘TAPANDO EL SOL’ junto a J18, el músico nos fascina con ‘NO SIENTO NADA’, una bachata que responde muy bien al Chile de hoy, que se va alimentando de nuevos estilos cada vez más presentes con la migración, la hiperconectividad y el acceso al folclore del centro del continente.
La interpretación de Paco Miranda sigue tan apasionada, y funciona increíble para este vaivén junto a Shirel, que llega acompañado por video dirigido por Rocío Huerta y Alessandra De Calisto. Dejar de sentir, o jugar a no sentir, se tiñe de erotismo en el single recién estrenado. Un despecho o un flirteo, no sabemos bien; un tira y afloja en código latino, que demuestra que Paco aún tiene mucho en cartera para saborear.