Hablar sobre un concierto tan esperado como el de Blur podría tornarse bastante tedioso, incluso cliché si se menciona la “deuda histórica”. Lo que sucedió este jueves 7 de noviembre en la Pista Atlética del Estadio Nacional fue más bien el fin de la espera de una generación completa que vio quebrada la posibilidad de verlos a fines del siglo pasado, época brillante para la banda entre “Blur” (1997) y “13” (1999).