No hay forma de escribir de Warpaint sin caer en el halago, en la admiración, en el “¿dónde estuvieron toda mi vida?”. La banda encontró una comodidad sobre el escenario que ya necesitarían muchas otras, con varios años más de experiencia. Las músicas dieron una clase, en un horario que no les hizo mucho a favor en cuestión de nueva audiencia, pero que explotaron a tal nivel que no creo que alguien quedara indiferente a ellas.
El poder de canciones como ‘Elephants’, ‘Beetles’ y ‘Krimson’ fueron excelentes para el aire frío que ya estaba corriendo en el Espacio Broadway y que, lamentablemente, mucha gente se perdió por hacer colas eternas para poder comer, en este festival. Quizás más tarde, con un poco menos de luz, el concierto de Warpaint se hubiese elevado al nivel de esos shows clásicos que da lata perderse.
Y lo mejor no son sus canciones, que no le hacen asco a los cambios de acordes de mayor a menor, tampoco es su talento que les permite intercambiar instrumentos como si nada, entre el bajo y la guitarra. No. Lo mejor y más entretenido es su relación con el público. Una dicotomía: cómo canciones tan densas pueden coexistir con esas personalidades tan divertidas de las cuatro integrantes.
El momento donde más reflejado se vio eso fue cuando Theresa Becker se acercó cantando al público y se robó unos lentes oscuros y un gorro con el que estuvo gran parte del show. La misma Becker preguntaba si se le veían bien los lentes, que cómo estábamos, y que nos encontraba muy lindos. Recursos baratos que para otra banda serían tomados casi que con humor, pero que en manos de Warpaint se ve natural, como una genuina preocupación por su público, que rápidamente se transforma en su single más conocido: ‘Love Is To Die’.
Viendo a Warpaint y algunos de sus pasajes, uno se pierde. Queda claro que es uno de los mejores shows que han pasado por Fauna, y también uno se pregunta dónde estaban todos esos tipos que buscan “la salvación del rock” con tanta desesperación, en grupos poco imaginativos y que entregan trabajos mediocres pero calcados de la fórmula, si tienen a algo como Warpaint en frente. Algo que les entrega pedazos de canciones, mezcladas con coros efectivos y una propuesta que se agradece ver, ya sea en este o en cualquier festival.