Extraordinaria crónica de un “verano fatal” escrita por dos popes de la música española: Nacho Vegas y Christina Rosenvinge. Este “Verano Fatal” está llamado a convertirse en el mejor álbum en castellano del año, pese a contar únicamente con 7 temas.
El antiguo miembro y fundador de Manta Ray (uno de los grupos míticos del indie noise hispano) ha gozado de una saludable carrera en solitario. Mimado por la crítica especializada y por el público indie, Nacho Vegas ha conseguido con sus últimos EP’s El hombre que casi conoció a Michi Panero y sus discos Esto no es una salida y El tiempo de las cerezas (la redención de Enrique Bunbury ante sus últimos experimentos y salidas de tono) convertirse en una de las estrellas del indie español. Junto a él la antigua cantante de pop en el dúo Álex y Cristina. Por suerte de todos no se quedó en esa etapa supérflua de los 80 y nos regaló notables canciones rock con los Subterráneos a lo largo de los 90 llegando a convertirse en una artista de culto tanto en España como en Sudamérica, consiguiendo excepcionales críticas también en EE.UU. (que la han valido para colaborar hasta con Sonic Youth).
Este Verano Fatal supone una nueva etapa en ambos intérpretes: una triunfal vuelta al rock en castellano por parte de Christina Rosenvinge, así como un posible noviazgo entre los dos artistas (hasta el pasado año, Christina Rosenvinge fue pareja sentimental del escritor Ray Loriga).
Este “duelo de caballeros” (como así lo denominan) se compone de siete canciones: tres escritas por Nacho, otras tres por Christina y una a medias. Destacan los temas Humo, No lloro por ti (maravillosa nana) o Que nos parta un rayo… pero sobre todas ellas, la canción que da título al disco. Verano fatal, posiblemente la canción de mayor calidad de este 2007 en el indie español. Lo importante de este EP no es únicamente la calidad de las canciones (que las tienen), sino el alto grado de adicción que conlleva su escucha.
Después de un verano fatal, viene un otoño triunfal.