Con “Siamese Dream” (Virgin, 1993), la carrera de The Smashing Pumpkins recibió un empuje que los dejó muy cerca de la consagración definitiva dentro de la masividad. Una obra impecable que les valió suculentas ventas en su natal norteamérica y giras cada vez más auspiciosas. Su contraparte residía en la pésima relación que existía entre los cuatro miembros de la agrupación, cuyas grietas y heridas se abrieron durante la grabación de aquel disco.
Quizás por eso, o también alimentado por el enorme potencial comercial que desde ese momento tenía la banda (a ojos de su casa discográfica), es lanzado en 1994 “Pisces Iscariot”, un menú cuyos ingredientes provienen de distintas épocas, lo que acrecienta en forma cuantitativa el interés de oírlo, porque atraviesa cada inquietud que rondaba a los cuatro de Chicago durante las dos placas de estudio que llevaban en el cuerpo y que, por diversas razones tuvieron un destino disímil, y en algunos casos altamente inmerecidos.
Está la temprana ‘La Dolly Vita’, que se aloja en el single de 1990 ‘Tristessa’ (Sub Pop); las apacibles ‘Soothe’ y ‘Blew Away’ (cantada por James Iha), ambas lados B de ‘Disarm’ (1993) y las mortíferas ‘Hello Kitty Kat’ y ‘Pissant’, las dos pertenecientes a la época del “Siamese Dream”: la primera fue a dar como contracara de ‘Today’ y la otra apareció en la edición japonesa de la misma placa, pero titulada como ‘Hikari Express’.
El corte promocional de esta obra fue ‘Landslide’, que era conocida entre los fans por estar incluida en ‘Disarm’ (1993), y que además es original de los legendarios Fleetwood Mac. Y si bien Billy Corgan no se acerca ni por asomo al registro de Stevie Nicks, logra estampar una cuota extra de dolor, entregando un efecto profundamente desgarrador. Otro cover que asoma es ‘A Girl Named Sandoz’, perteneciente a los británicos The Animals.
‘Whir’ y ‘Starla’ son dos joyas que también poseen un lugar en este compendio, que se agradecen sin reparos y explican en parte este lanzamiento. A pesar de las vicisitudes amenazantes halladas en el camino, Corgan y los suyos tenían su norte definido sin apelación; y el aparataje que contaban para lograr su cometido estaba imbuido de ideas que rebosaban efectividad y que se desplegaban con pasmosa facilidad en el universo sonoro de la agrupación. “Pisces Iscariot” fue otro paso adelante, el problema que siempre tuvo fue uno sólo: haber nacido entre medio de dos monstruos. Uno ya era conocido en todos lados; el otro se presentaría un año más tarde.
Audio: The Smashing Pumpkins – Landslide (Fleetwood Mac Cover)