Hoy en día toda Inglaterra es roja. No digo que la pérfida Albión se haya convertido en la homóloga cubana a este lado del Atlántico. Ni Gordon Brown es un Castro, ni nada que se le parezca. Lo que quiero afirmar es que todo es “roux”. Las pistas de baile, las listas de ventas, las listas de tendencias,… todo es “roux”. ¿La culpable? Elly Jackson, vocalista del dúo La Roux. Esta pelirroja ha revolucionado el panorama británico de esta temporada gracias una serie de hits inapelables. Pero tampoco podemos olvidar a Ben Langmaid, artífice de las hipnóticas bases musicales que pueblan las composiciones de este disco debut. Esta roja es la exponente definitiva del revival ochentero que nos lleva atacando desde hace un par de años. Al igual que Ladyhawke, La Roux ha conseguido imbuirse en un mar de influencias para acabar logrando una personalísima colección de canciones. Gracias al caribeño “Quicksand” consiguió colocarse el año pasado en las listas de artista a seguir. ¿El globo rojo se ha desinflado en el largo? No. El trallazo “In For The Kill” demuestra que no estábamos equivocados. Una pieza oscura, completamente atípica, en la que la voz de falsete de Elly se convierte completamente irresistible. Eso mismo ocurre con la agresiva “Tigerlily” (excelente canción que debía haber sido single antes que “I’m Not Your Toy”) y con su primer número uno “Bulletproof”. Tras este apabullante comienzo, lo normal es que el resto pareciese mucho más flojo. En ningún momento; para eso está “Fascination”, “Reflections Are Protection” o la bonus track “Growing Pains”. No estamos ante electro ochentero de siempre, ni ante el experimento nu rave de última ola. El proyecto La Roux es mucho más y ya nos lo han demostrado. Si a esto añadimos la fama de déspota y star que se gasta Elly para qué queremos más.
PRESS ESC TO CLOSE