Gracias al retorno de My Bloody Valentine, el noise ha vuelto a copar las portadas de las sesudas revistas musicales y sus apocalípticas distorsiones han servido de influencia a una nueva tanda de formaciones que las han trasladado a otros campos musicales, como el rock y la electrónica. Producto de este renacimiento (y artífices de su nuevo éxito), Fuck Buttons se han convertido en los niños bonitos de la escena alternativa británica. Auspiciados por Portishead (no obstante son de Bristol) y por la gran promotora All Tomorrow Parties, han lanzado su primer disco, “Street Horrrsing” (no es error de imprenta). La fórmula del disco es simple: repetición de un motivo o sonido hasta la saciedad, añadiendo poco a poco diferentes pistas de sonido (ritmos tribales, sintetizadores psicodélicos, voces distorionadas). El resultado: seis temas que componen la que se podría catalogar como la primera sinfonía del siglo XXI. Cincuenta minutos que podrían haber convertido su escucha en una experiencia orgánica sublime (como promete su comienzo con “Sweet Love For Planet Earth”, el mejor corte del álbum) acaban por parecer repetitivos por la inclusión al final de la mayor parte de los temas de unas voces que recuerdan claramente la influencia de Animal Collective en el disco. Si hace unas semanas hablábamos de la influencia de dicha banda en las percusiones del nuevo disco de Sigur Rós, en este caso se puede hablar del influjo de la tonalidad distorsionada de las voces al estilo “Peacebone” al final de temas como en el caso de “Okay, Let’s Talk About Magic” (diez minutos que funcionarían a la perfección como pieza instrumental, sin ningún tipo de voces). De todas maneras no se puede hablar de experimento fallido, sino de música experimental que puede no estar al gusto de todos (¿acaso no es esa controversia algo bueno?).
7
Fuck Buttons "Bright Tomorrow"