Rufus does Rufus (en Madrid)
Gracias a un cúmulo de casualidades, este lunes 12 de noviembre he podido acudir en calidad de prensa al agotadísimo concierto que Rufus Wainwright realizó en el Teatro Coliseum situado en la Gran Vía de Madrid (de igual manera que acudí a la interesante entrevista que Cedric Bixler-Zavala, el vocalista de The Mars Volta realizó en un hotel madrileño).
Cinco minutos después de la hora acordada, el exquisito Rufus Wainwright y su banda hacían acto de presencia en el escenario y tras un sonoro “hola” comenzaron los primeros compases de Release The Stars al que continuó Going To A Town, el que fuera single de presentación de su último disco Release The Stars. Le siguieron Sanssouci y el nuevo single Rules And Regulations (que funciona mucho mejor en directo que en el disco). Tras este primer repaso al último disco, es el momento en que la banda abandona a Rufus y le deja solo ante el piano. Es en ese mismo momento también en que Rufus se crece y arremete con un preciosista Danny Boy de su primer disco y con una interpretación sublime de Cigarettes and Chocolate Milk (uno de los grandes momentos de la noche, y canción dedicada al cantaor Camarón de la Isla. Una muestra del interés de los Wainwright por la cultura popular de los países que visita en sus giras, aunque también podría ser un guiño por las adicciones que sufrieron ambos artistas, con diferente final) y la sorprendente The Art Teacher del segundo Want. Tras unos cuantos temas del último disco, referencias a la monarquía española (aludiendo al reciente incidente con Hugo Chávez, Rufus proponía una reunión entre el rey de España y el presidente de USA para que también le mandase callar), a Pedro Almodóvar (el oscarizado cineasta le mando rosas al camerino) y a la belleza de Toledo y sus mazapanes, Rufus decide montar una fiesta con Between My Legs justo antes del primer descanso. Primera hora de concierto… The Show Must Go On
Tras 15 minutos de descanso, Rufus vuelve a escena vestido de tirolés como ya aparece en el folleto de Release The Stars y tras un épico Do I Disappoint You, decide recordar su magno espectáculo Rufus Does Judy con Foggy Day y If Love Were All con el acompañamiento de su madre al piano. Tras recordar a Judy Garland es el momento de uno de los climax de la noche, la interpretación de la desgarradora Beautiful Child que se crece aún más en directo (a pesar de la inclusión de dos bailarinas pseudoflamencas en el escenario). Tras la dupla Not Ready To Love y Slideshow, es el momento en que Rufus decide dejar demostrar su capacidad vocal y entonar Macushlah, una canción típica irlandesa, sin micrófono. Tras la explosión de aplausos del público es el momento de 14th Street que marca la festiva despedida de Rufus y cada uno de los músicos al acabar sus respectivos solos.
Pero el concierto no podía acabar de esa manera y Rufus volvió con seis verdaderos himnos en el único bis de la noche y vestido con un albornoz blanco. El primero fue I Don’t Know What It Is (una de las mejores canciones de ambos “Want”, una pena la no inclusión de Oh What A World dentro del setlist) y una certera y bella Poses. Vuelve a aparecer su madre y realizan dos de los mejores temas de la noche: una revisitación al mito de Judy Garland con la archiconocida Somewhere Over The Rainbow de The Wizard Of Oz y una especialísima interpretación de Barcelona. Pero no podía acabar sin una nueva sorpresa y esta no se hace esperar mucho. Rufus realiza un playback de Get Happy transformado en la propia Judy Garland con los chicos de la banda como bailarines, acabando con la interpretación de la polémica Gay Messiah (con la nueva aparición, en esta ocasión más contenida, de las bailarinas).
Desechen las posibles referencias a Jeff Buckley cuando se refieran a Rufus Wainwright. Rufus es Rufus, tanto sus cinco discos como estas tres horas de concierto lo demuestran.
Rufus Wainwright “Somewhere Over The Rainbow” (live @ Madrid 12/11/2007)