Foto por Mauricio Zamudio | Revisa más imágenes del show en Facebook
Dicen que no hay primera sin segunda, y Mayer Hawthorne parece haberlo entendido a la perfección. Hace poco más de un año, nos tomamos con sorpresa la confirmación de la primera visita al país del oriundo de Detroit, y en un abrir y cerrar de ojos ya lo teníamos de vuelta. Eso sí, ahora con nuevo material bajo el brazo, el recientemente estrenado “How Do You Do” (2011).
La jornada se inició a eso de las 23:15 horas cuando, sin previo aviso, apareció en el escenario un Hawthorne de impecable traje blanco y secundado por The County, su experimentada banda soporte. Abrió los fuegos ‘Maybe So, Maybe No’, uno de los éxitos del repertorio, seguido de la original de Snoop Dogg, ‘Gangsta Luv’; canciones que lograron impregnar de energía la presentación desde un comienzo.
“We don’t play concerts, we play shows. So let on the party people come to the front”, decía el solista apenas terminadas las primeras dos canciones, dejando en claro cuál era el objetivo: armar una fiesta de proporciones.
‘Make Her Mine’ fue la encargada de continuar la noche, generando un ambiente entre lo bailable y lo romántico. Y precisamente ahí está la gran habilidad del protegido de Stones Throw, quien es capaz de crear y traspasar distintas atmósferas dentro de un mismo show, apuntando en pasajes a sectores de gran emotividad y en otros, llevando a la celebración total.
Por eso, no sorprendía que de un instante a otro todo el público diera lugar al romanticismo con ‘Shiny & New’, y de pronto todo fuera una pista de baile con temas como ‘A Long Time’ y ‘Your Easy Lovin’ Ain’t Pleasin’ Nothin’.
Esto, claro, complementado con el carisma del crooner, que le permitió estar interactuando durante todo el show con el público a través de aplausos, bailes –incluso enseñó un paso-, miradas cómplices, cartas y alcohol (compartió bebida con el público en ‘Henny & Gingerale’).
El hit indiscutible de Hawthorne, ‘Just Ain’t Gonna Work Out’, vino ya cerrando la velada, confirmando que, pese a que la gira se enmarca en la presentación de su última placa, el show tuvo mucho de su gran debut, “A Strange Arrangement” (2009).
Y tras ver aspectos como las coreografías de la banda, el contacto de ellos con el público, la energía en escena y a todos los presentes bailando, sólo queda un pensamiento en la cabeza: con Mayer Hawthorne en la casa, la fiesta es segura.