En 1996 Beck decidió revolucionar la escena (anti)folk norteamericana con una pequeña obra maestra. El actual cienciólogo que sorprendió con MTV Makes Me Want To Smoke Crack y el himno generacional Loser nos regaló Odelay, uno de los discos “menos” comerciales que más ha vendido en la historia. Gracias a temas como Where It’s At, The New Pollution o Devil’s Haircut, pasó a ser el enésimo icono de la modernidad de finales del siglo XX. Fueron sucediéndose los años y la figura de Beck fue bajando en popularidad, que no de calidad (su reciente The Information fue de lo mejor del 2006). Lo que no ha variado ha sido la calidad de Odelay, un trabajo atemporal que no es que mejore con el tiempo, sino que está igual que siempre, en plena forma.
Esta lujosa reedición contiene 33 temas en un doble álbum. El primer disco contiene las 13 canciones remasterizadas del original de 1996 y dos temas inéditos (Inferno y Gold Chains). En el segundo CD aparecen dos interesantes remixes a cargo de U.N.K.L.E. (Where It’s At) y Aphex Twin (Richard’s Hairpiece) y una cantidad ingente de b-sides y rarezas, entre las que destacan la cover de Skip James (Devil Goy My Woman), Electric Music And The Summer People y la versión Spanish de Jack-Ass bajo el explícito título de Burro. Una edición a la altura, órale si hubiese que tener que poner alguna pega, habría que hablar de la ausencia de la visión más rockera que Noel Gallagher hizo del Devil’s Haircut o del remix de Butch Vig para Jack-Ass. Aún así, estamos ante un verdadero imprescindible.