Baúl POTQ es una nueva sección dentro de POTQ Magazine dentro de la que se agruparán reseñas de discos (o libros u otros) publicados antes de 1990. En esta primera entrega repasaremos el debut en largaduración de Pixies, una de las bandas que estarán en Lollapalooza Chile 2014.
El álbum que inspiró a Billy Corgan, a PJ Harvey y al mismísimo Kurt Cobain. El hermano grande de “Come On Pilgrim”. Con mal desempeño en las listas cuando salió, ahora es habitual encontrar a “Surfer Rosa” dentro de ránkings de mejores discos. Crudo y sucio, se caracteriza por voces violentas y temáticas bizarras. Ni hablar de su heterodoxo proceso de grabación, donde algunos coros fueron registrados en el baño del estudio. Dentro de todo, una obra marcada por la constante intención, casi con urgencia, de sonar diferente a lo establecido.
‘Bone Machine’, el primer track, es denso y oscuro, con breves hiatos de tranquilidad donde se puede oír la voz de Kim Deal creando contraste con la rudeza que marca el paso de los minutos en un ajuste interesante. ‘Something Against You’ inicia dividiendo la atención entre una batería palpitante y una guitarra reiterativa, dejando su lírica en un segundo plano, al borde de lo inescrutable.
La quinta canción, ‘Gigantic’, es una de las más memorables de Pixies. Cantada por la bajista, ostenta un coro muy pegajoso (“Gigantic, gigantic, gigantic / A big big love”) y un desarrollo tremendo en la interpretación de cada instrumento. La banda dice haberse inspirado en una película sobre un romance interracial, mientras que la leyenda urbana apunta a que es una oda a un hombre negro muy bien dotado.
Éste también es el disco donde se encuentra la mítica ‘Where Is My Mind?’, popularizada en 1999 por la película de culto “Fight Club”. Más allá de su notable cameo fílmico, es un momento especial en esta placa: marca un quiebre en su sonido, un cambio de dirección que apunta a una faceta más introspectiva y personal. No trata sobre relaciones sociales o una actitud hacia algo en particular, sino que se enfoca en estar solo. Black Brancis ha declarado que este corte está basado en una ocasión en que nadaba en el mar del Caribe y un pececito lo comenzó a seguir… pero el resultado final fue mucho más profundo.
‘Tony’s Theme’, más que una canción, es un veloz grito de aliento. Un tema sobre un superhéroe llamado Tony, y no dice nada más. Con algo de distorsiones y esa clásico suciedad, es una suerte de ying para el yang que es ‘Oh My Golly!’, que la sucede gustosamente. ‘Vamos’ es unas de las composiciones más contundentes y frescas de este álbum, iniciando con rasgueos de guitarra y versos en español precario que dan paso a un salto de batería y una incesante sucesión de detalles hasta que Francis grita. Se retoma la normalidad y terminan él y Deal susurrando “vamos a jugar a la playa”.
‘Brick Is Red’, el track final, no es ni un momento depresivo ni una esquizofrenia gritona. Más bien, puede verse como un híbrido entre ambos conceptos. Pareciera como si alguien hubiera viajado en el tiempo desde hoy al ’88 y la hubiera incluído. En tanto suena, se siente como si hiciera un balance de todo aquello escuchado: suma y resta, lo malo y lo bueno, lo que funcionó y lo que no. Y listo. Fin a “Surfer Rosa”. Queda poco por decir de este disco, porque su trascendencia lo resume. Es tan bueno como bizarro y si usted, lectora o lector, no lo ha escuchado, vaya ahora mismo a hacerlo.
1. Bone Machine
2. Break My Body
3. Something Against You
4. Broken Face
5. Gigantic
6. River Euphrates
7. Where Is My Mind?
8. Cactus
9. Tony’s Theme
10. Oh My Golly!
11. Vamos
12. I’m Amazed
13. Brick Is Red
Pixies se presentará por partida doble en nuestro país durante las próximas horas. Este viernes 28 de marzo dará un Sideshow en el Teatro La Cúpula, mientras que el domingo 30 de marzo tocará en el Claro Stage de Lollapalooza Chile 2014 como parte de la segunda jornada de este festival, a realizarse en el Parque O’Higgins de Santiago.