Sin los emblemáticos Keith Moon y John Entwistle (batería y bajo originales) cualquiera podría pensar que The Who no tiene razón de ser. Pero anoche en la XLIV versión del Super Bowl la banda dictó una cátedra con un medley de sus más grandes éxitos, en el ya tradicional show de mediotiempo en el que han actuado estrellas como Michael Jackson, U2, Paul McCartney, los Rolling Stones, entre otros.
Liderados por los carismáticos sobrevivientes Pete Townshend, cerebro de la banda, y la característica voz de Roger Daltrey, The Who sigue sonando muy fuerte, acompañados por Pino Palladino (bajo), Simon Townshend (guitarra) y Zak Starkey (batería). Más vivos que nunca como renegando aquella frase que a mediados de los 60 sería el estandarte de su generación "I Hope I die before get old" símbolo de la rebeldía y el descontrol; los primeros pasos del punk.
Esta vez no rompieron sus instrumentos y ya es inevitable que la edad en sus rostros no transmita la fuerza de antaño, pero la puesta en escena, la perfecta ejecución y un medley ideal convirtió en un estruendo viviente a los 74.000 presentes en el Sun Life Stadium de Miami.
The Who estalló con fuegos artificiales, luces por todo un estadio y una banda impecable. Un espectáculo inolvidable, con la promesa bajo el brazo de un nuevo disco; una obra llamada Floss, que sigue los patrones de Tommy y Quadrophenia. Habrá que ver lo que sucede con lo que queda de una de las bandas más legendarias de la historia.
*La transmisión oficial no es la que ESPN emitió anoche para Chile con desfase de audio y otros problemas.