Ratatat debutará en Chile este 6 de octubre junto a Aye Aye, Matías Aguayo y Vicente Sanfuentes en la Sala Omnium de Las Condes. En el marco de esta visita, pudimos hablar brevemente de forma previa con Evan Mast vía Skype, quien nos contó lo que espera del show que la banda neoyorquina dará en Santiago, cómo fue el proceso creativo de su nuevo álbum Magnifique (2015), e incluso sus preocupaciones sobre el escenario político actual de los Estados Unidos.
Vas a tocar con grandes músicos electrónicos chilenos, como Matías Aguayo y Vicente Sanfuentes. ¿Están emocionados por tocar en Chile? ¿Qué esperan de este show?
“Sí, estamos ansiosos por tocar. Nunca hemos estado en Chile, así que será una nueva experiencia. Es emocionante ver cómo será todo allá. Será entretenido”.
¿Existe algún motivo para no incluir muchas letras en tus canciones? ¿Cómo sientes la interacción con el público en tus shows?
“Creo que es algo que nos juega a favor, porque podemos ir a cualquier parte del mundo y la gente puede disfrutar todo el espectáculo al mismo nivel sin ningún problema. Incluso tocar así se siente de esa manera, pero lo hace cool para nosotros. Estamos bastante interesados en eso”.
Leyendo algunas entrevistas, siento que el proceso creativo de Ratatat es realmente orgánico. Todo fluye de una manera muy natural. ¿Podrías describir cómo es este proceso?
“Sí, es un proceso muy orgánico. Es difícil ponerlo en palabras, porque es ocupar el lenguaje de la música, no el lenguaje de las palabras. Pero sí, es algo muy íntimo cada vez que haces una canción.
Son una especie de reglas creativas abstractas las que tienes en tu cabeza, que influyen en el proceso creativo. Algo como ‘esto se siente bien, esto está mal’, y no necesariamente debe haber una razón para eso, pero sabes que de cierta forma es así. Que hay reglas, que cambian con el tiempo, pero te van guiando en ese proceso”.
Magnifique tiene muchas más guitarras que el resto de la discografía de la banda. ¿Hay alguna razón detrás de esto?
“Fue básicamente una reacción a los discos que habíamos hecho previamente. Esos álbumes son mucho más sobre las texturas y los sonidos que logramos para esas canciones… O a lo mejor sobre hacer lo que quisiéramos y experimentar con lo que pudiésemos ponerle las manos encima, y lograr una amplia variedad de sonidos.
Fue un proceso sumamente entretenido el de esos álbumes, pero con el de Magnifique decidimos concentrarnos en experimentar en la escritura de las canciones y en los arreglos. Fue realmente fácil concentrarse en esos elementos y en los de producción un poco más, por lo que pudimos enfocarnos en el poder de cada una de las canciones, más que en los primeros dos álbumes. Fue todo en ese marco, el de hacer nuevos descubrimientos.
Es un poco aburrido, pero cuando haces un nuevo disco, siempre se trata sobre ver ese marco. Qué puedes agregar, qué puedes sacar de lo que ya hiciste, y explorar nuevas áreas que no hayas chequeado antes”.
Mi pregunta final es sobre el escenario político por el que está atravesando Estados Unidos. ¿Estás preocupado por lo que está pasando actualmente allá?
“Sí (risas). Es devastador. Es como un sueño del que no puedes despertar. No sé, sólo espero que pase lo mejor. Vamos a tratar de que todo salga de la mejor manera posible”.