El otoño comenzó con canciones apropiadas. Los Tristes, después de sorprendernos meses antes con el single ‘Pileta’, estrenaron en abril su debut homónimo compuesto por ocho canciones y producidos por Fernando Milagros.
En medio de la planificación de su concierto de lanzamiento y otras fechas, conversamos con la banda, compuesta por Luciano Rubio (conocido por su trabajo audiovisual con artistas como Gepe y Fernando Milagros) y los hermanos Isidora, Gabriela y Pablo O’Ryan. No estuvo presente el quinto integrante, Ariel Velasco.
El primer en llegar al punto de encuentro es Luciano. Lo primero que le pregunto es sobre la diferencia entre hacer videos para canciones de terceros y para las suyas, a propósito del estreno del video de ‘Pileta’.
“La diferencia principal es que cada vez que hago un video de un grupo, escucho la música y trato de conectarme ni siquiera con lo que dice, sino con lo que me pasa, con las imágenes que empiezan a aparecer. Y acá, como la canción también es mía, todo era demasiado literal. Entonces, lo importante era ver cómo escapar de esa idea, porque ya sé de lo que se trata…
“¡Hola!”, escuchamos. Es Gabi, la segunda en llegar.
Cambiamos el tema. Gabi me cuenta que juntarse fue un proceso natural. “Nos juntamos porque habían canciones bonitas que habían empezado a inventar las distintas personas que ahora formamos parte de Los Tristes y, eso mismo nos sedujo a la idea de hacerlas en serio. Entonces partimos de esa idea inicial y luego de lo colectivo, que era trabajar los temas juntos y convertir esas canciones en algo de la banda. Porque entre las originales y las finales, se nota mucho la mano del colectivo. Y sobre eso, aparecieron canciones nuevas. En toda esa vuelta han pasado como cuatro años. Y ahí también hay algunos que se han ido, otros que han llegado”, explica.
“Y lo bonito que tiene esto es que, en general, con todos los del grupo somos todos muy cercanos hace mucho tiempo, entonces, la Gabi ya conocía mis canciones, yo las de ella y así… pero en este proceso de hacer canciones juntos, también fue como empezar a tocar con un amigo, que eso también involucra otras cosas. Y tengo la sensación de que planeamos sin decirlo, un proyecto de largo plazo. Yo sigo sintiendo eso. Creo que la música que hacemos no es algo de corte pop que sale y que dura no sé cuánto y se acaba. Es lento”, agrega Luciano.
Junto en ese momento, aparecen Isidora y Pablo. Una trabajadora del café nos pide que nos cambiemos de mesa, porque ya somos muchos.
Mesa grande, más tazas de café. Continuamos.
Gabi: “Hay un amor por pertenecer a la música que para ninguno de nosotros es como ‘hay que hacer esto para vivir de algo’, y todas esas presiones de si me está dando o no me está dando que a veces sí tienen los trabajos más artísticos. Acá la música para todos es uno de los complementos de las otras mil cosas que cada uno desarrolla, también en ambientes artísticos. Tenemos pegas que no son solo la música, todos convergemos acá, en una pasión de estar haciendo algo que a todos nos hace mucho sentido”.
Luciano: “Sí, no está ese apuro. Y a mí también me pasa que como tenemos tantos amigos músicos, también cachamos que ahora está un poco saturado la onda del pop en Chile, creo que era bueno hacer algo que no estuviera dirigido hacia eso, aunque yo creo que igual algún día vamos a sonar en Radio Imagina, pero es otra cosa”.
—Algo que veo bastante desde hace unos años hasta ahora -y de forma creciente- es esa ansiedad en los músicos. Desde estar presente en internet todo el rato, hasta de sacar cosas rápido, casi para que no los olviden. Veo que esa ansiedad se los va comiendo. No dan el tiempo para que los proyectos crezcan y maduren, hasta incluso en la relación con el público que los va siguiendo. ¿Creen que esta tranquilidad que tienen viene también por venir de otras áreas artísticas?
Gabi: “Yo creo que hemos ido entrando en un estado de confianza plena, en la que las cosas que hacemos son buenas porque nos gustan. Entonces, desde esa confianza, hacemos sesiones bien peleadas, somos cinco y todo lo que salga de ahí tiene que gustarle a cinco. Confiamos en lo que estamos haciendo y tenemos la urgencia de encender las canciones que están viniendo de un éter, no hay apuro y, al revés, a mí me da susto que esto tome una velocidad que te arrolle, porque lo bonito es ir haciendo el paso a paso, y eso da el tiempo de que las cosas maduren, que maduremos como grupo”.
Luciano: “También siento que hemos ido encontrando otras cosas. Por ejemplo, gráficamente, hemos definido un poco qué son Los Tristes, hay un concepto bien redondito. Le hemos dado mucha vuelta a eso. Igual creo que si vamos en primera, tenemos que pasar a tercera. Ya estamos haciendo canciones para un disco nuevo. Como que automáticamente el tiempo te va diciendo que hay que ponerle un poquito más”.
—Ustedes tocaron en Ecuador, antes que en Chile. ¿Por qué?
Isidora: “Ecuador ahora es un país muy amigo de nosotros, porque ahora un integrante de Los Tristes vive allá, entonces, tenemos que estar paseando e ingeniando planes para seguir juntos”.
—Y ¿ahora está acá? ¿quién es?
Isidora: Soy yo, ja, ja, ja. Obviamente, hay que estar viajando para las cosas importantes que van pasando y organizamos esta gira para estar juntos allá y armar cosas, tantear terreno.
Luciano: “También nos pasa que tenemos una energía que hay que ocupar, porque estamos empezando. Y esa energía la podemos usar para afuera, porque es lo mismo que tocar acá. Creo que también hemos puesto un foco en eso. Si tenemos un poco de fuerza, ocuparla toda en Chile no creo que sea… aparte la música no es local. Y nos ha pasado, por ejemplo, con Spotify en México, según lo que arrojan las cifras, nos han escuchado lo mismo o más que en Chile. Entonces, eso igual te da curiosidad. Creo que en el mercado que hay ahora, somos medios raros en Chile. Onda, ¿con quién tocamos ahora?”.
—Pero yo no los encuentro raros.
Luciano: Pero ¿con qué banda nos juntarías? Ya, ahora nosotros te entrevistamos a ti.
—Hay varias, pero así rápido, por ejemplo, con la Felicia Morales que tiene un concierto muy bonito, con Niña Tormenta y hasta Patio Solar incluso. Yo creo que en Chile se hace mucha música con un nivel evidente de tristeza. Creo que lo que distingue mucho a Los Tristes es esta intención coral, muy colectiva, pero creo que en el sentimiento, en Chile están súper acompañados.
Gabi: “Claro, se pueden buscar hermanos musicales entonces”.
Luciano: “Entonces ahora empieza eso también. Igual hoy hablaba con Erwin que nos está ayudando con la gráfica y hablábamos de eso. Que ahora viene la etapa de ver qué pasa con todo esto, una energía que tiene que moverse sola y trabajar con otros como colectivo”.
Gabi: “Creo que todas nuestras canciones respiran algo parecido, entonces trabajarlo juntos, nos hizo tocar tanto el origen de los temas, sino que ver de qué manera nos adaptábamos para trabajar una melodía. Incluso, tú podrías pensar que lo hizo una misma persona, porque la cadencia, el sentir de la canción, es como si viniera de una misma madre y yo creo que eso nos hace también habernos encontrado y unirnos, porque nos sentimos identificados con el trabajo del otro, entonces no se hace tan difícil querer pertenecer a eso”.
Luciano: “Y tenemos un filtro feroz con las canciones también. No cualquier canción pasa”.
Gabi: “O de repente nos ha pasado que dejamos canciones a la cola y otras que pasan al tiro, un ensayo y queda lista”.
—Es difícil llegar a eso con tantas personas. Ponerse de acuerdo de inmediato en algo tan subjetivo…
Gabi: “Es que a veces fluye y además nos queremos harto. Hay historias de mucho tiempo de conocernos. No vamos a querer quebrar la relación por una canción que no funciona a la primera”.
—¿Cómo se conocieron?
Gabi: “Bueno, nosotros padres se conocieron antes…”.
Luciano: “Y tuvieron sexo ja, ja, ja”.
Gabi: “Somos hermanos (señalando a Pablo e Isidora) y Luciano está en la familia hace tiempo, ha entrado por distintas partes. Compartimos sobrinos y trabajo por hartos años también. Y amor”.
Luciano: “Y sexo, ja, ja, ja. Mi ex mujer es hermana de ellos, desde hace mucho rato”.
—Desde que nació, ja, ja, ja.
Luciano: “Ja, ja, ja. Y yo y la Gabi además trabajamos juntos mucho tiempo en dirección de arte y en producción de fotografía. Nos conocemos hace como 18 años”.
Gabi: “Nos conocemos los demonios y los podemos resistir”.
Los Tristes es el nombre certero para unir al quinteto y la música que hacen. Existe una carga de nostalgia, de tristeza, pero suena colectivo, jamás solitario. Podrían ser primos de Bahía Inútil y bueno, de cierta forma lo son, por su trabajo en conjunto con Fernando Milagros. Eso sí, se desmarcan, hay algo más allá. Están las atmósferas y también las armonías vocales son quizás lo más entrañable de su trabajo.
Gabi: “Sí, lo de los coros es una temática”.
Luciano: “Yo creo que viene del inicio casi del miedo de cantar solo de cada uno. Empezamos a cachar que hay un lugar muy bonito en el que cantamos todos y bueno…”.
Isidora: “Igual, la Gabi tiene el mal de la segunda voz”.
—¿El Síndrome Ella Baila Sola?
Gabi: “Ja, ja, ja sí. Cuando lloramos al nacer, lloramos en segunda voz”.
Luciano: “En ‘Pileta’ cantamos todos siempre, ahí nos vamos al chancho igual”.
Isidora: Sí, pero por lo menos ahí vamos todos al unísono, no hay armonías. Igual, cuando logramos hacer una sola voz, no resistimos hacerla todos juntos, ja, ja, ja.
Foto de portada: Rodrigo Subiabre-Cantín