Septiembre es, quizás, el mes que más y mejores canciones tiene del calendario. Para una parte del mundo, significa la llegada del calor, de la primavera, acercarse al final del año en el colegio o la universidad y, por supuesto, las Fiestas Patrias, que traen con ellas descanso, ver a los amigos, ver a la familia, dañarse tomando terremoto o pagar precios absurdos en las fondas porque es lo que hay.
Por una parte, septiembre es un mes doloroso en Chile, pero que trae momentos que significan reunión y escape, en partes iguales. Momentos para huir. Todo es válido. Para la otra parte del mundo, el norte, es la fecha del fin del verano, del inicio de clases. Comienzan los días cada vez más cortos y la depresión que provoca la ausencia de luz. Pero también significa el inicio de una nueva oportunidad para muchas personas.
Y, entre medio, la música. La música siempre está ahí, invisible, intangible, pero innegablemente presente. Como septiembre que, desde un tiempo antes, está marcado en el calendario de nuestros planes. Hay veces que pensamos en su llegada incluso cuando aún falta un poquito para ello. The Field Mice, la banda, al igual que su sello Sarah, que parecieron existir sólo para recordar que las cosas bellas suelen ser efímeras y que arder cuando uno aún está lleno de vida no tiene que ser dramático. The Field Mice nos avisaba que septiembre no estaba tan lejos.
Hay canciones sobre septiembre que son elegantes e irónicas como ‘Septiembre’ de Carlos Berlanga. Otras que nos identifican, por diferentes razones, como ‘Así Canta el Gallo’ y ‘Viva el 18 de Septiembre’ de Isabel Parra u ’11 de Septiembre’ de Gondwana. Septiembres románticos con Miguel Bosé, Los Galos o Sandro y su ‘Septiembre Amor’. Hay días icónicos en el mes -como el 29- para Las Ligas Menores, el 16 para Juniper Moon y, cómo no, el 7 con Mecano, para ese reencuentro una vez al año, de una pareja en la que hubo llamas y no queda tan claro si ya sólo existe ceniza. También septiembres juveniles con Las Lava Lamps.
No hay que olvidar que hay septiembres que suenan muy bien en francés. Desde ‘Station Quatre-Septembre’, con Vanessa Paradis interpretando una canción escrita por Benjamin Biolay -que se inscribe en toda una tradición casi infinita de pop francés, con ligeros aires cabareteros y juguetones- al mito del rock francés Noir Desir, liderados por el infame Betrand Cantat, casi recitando ‘Septembre en Attendant’. Y para mitos, de los de verdad, los de la chanson y la canción melódica del país de los pasteles más ricos, con Gilbeart Bécaud y George Brassens, y sus ‘C’est en Septembre’ y ‘Le Vingt-deux Septembre’, respectivamente. Y, para terminar el paseo por Francia con sabor a empanada, Holden, a los que en un tiempo casi adoptamos (en realidad, sí, adoptamos), cantando ‘En Septembre’.
Por supuesto, la música anglosajona ha sido pródiga en muchos septiembres variados. ¿Quién no ha bailado ‘September’ de Earth Wind and Fire?, un clásico que podría estar en la banda sonora de la película Gloria y encajar perfectamente. O elegir si revolcarse en la ‘September Grass’ de James Taylor o la ‘September Rain’, del estándar que pasó por la voz de The Platters o Dinah Washington, entre varios. Green Day pedían que los despertaran cuando se terminase septiembre, quizá por no llevar bien esa melancolía de la que hablamos al comienzo.
Hay, literalmente, docenas de canciones sobre el ataque del 11 de septiembre. No el de Chile, sino el de Nueva York. Tori Amos, Ryan Adams, Arcade Fire, Beastie Boys, Beyoncé, Steve Reich, My Chemical Romance, Living Colour, Slayer, Tayor Swift, Velvet Revolver, Neil Young o, hasta casi un disco temático como estado de ánimo, como fue The Rising de Bruce Springsteen.
¿Y si hubiera que elegir sólo una?
Lo bueno es que nunca hay que elegir sólo una. La música nos pertenece y está para cada momento. Podríamos pasar casi entero el mes, variando nuestra playlist, no aburrirnos nunca, saltando del folclor al pop, el reggaetón o hasta el metal. Septiembre tiene la cualidad de habernos regalado una infinidad de historias, algunas alegres, la mayoría tristes, incluso dramáticas como las que se refieren al once, el de aquí, el de allá. Pero siempre habrá favoritas. Colonizados por la cultura anglosajona, septiembre es un mes que el cine o las canciones, asocian al final del verano y de los romances que pasaron en él. Pero hay una canción, en el que el amor surge en septiembre, aunque dura poco. La muerte de Alex Chilton fue demasiado temprana, como la muerte de ese amor nacido en este mes, cuando en otros lugares muere el verano. Pero, al menos, todos los septiembres (y los noviembres, y los eneros y los abriles) seguirá ahí ‘September Gurls’.
¿Cuál es tu canción de Septiembre?