En 2017, la radio FM en Noruega no existirá más. Así por lo menos lo estima conveniente el Congreso de este país, en donde aluden a que los costos de mantener esta red en un país con sólo cinco millones de habitantes, es en realidad innecesario, apunta el Washington Post.
Las transmisiones serán reemplazadas por la red Digital Audio Broadcasting (o DAB), la cual supone una mejora en los costos -cerca de ocho veces menos que su predecesora- y en la calidad de audio transmitido. Además de lo anterior, también se crearán más espacios dentro del ancho de banda para que otras emisoras tengan un lugar en donde funcionar y emitir contenidos.
A pesar de todo lo anterior, sólo un 17% de la población apoya la medida, alegando que 7,9 millones de dispositivos se verán afectados por este cambio de frecuencia, sumándole que sólo el 20% de los autos que hoy circulan por la nación cuentan con un equipo compatible con DAB, lo cual ciertamente deja a gran parte de los ciudadanos fuera de este sistema, dado el alto costo que implica comprar un adaptador para escuchar estos contenidos (cerca de US$178).
El Ministro local de Cultura, Thorhild Widvey, dijo en2015 que “los radioescuchas tendrán acceso a más contenidos radiales diversos y pluralistas, así como también podrán disfrutar de una mejor calidad de sonidos y nuevas funcionalidades”, añadiendo que “la digitalización de la radio abrirá las puertas a una gran cantidad de emisoras, beneficiando directamente a los ciudadanos”.
El debate al respecto no tiene una solución muy alentadora para la gente, ya que otros países también pretenden sumarse a esta tendencia.