Now Reading
Of Monsters and Men: la fórmula del éxito

Of Monsters and Men: la fórmula del éxito

Los islandeses Of Monsters and Men fueron protagonistas de una de las primeras postales realmente masivas de la primera jornada de Lollapalooza. Eran miles de personas, la mayoría muy jóvenes, las que aguardaban por ellos cuando subieron al escenario Itaú, todos vestidos de riguroso negro, salvo la cantante y guitarrista Nanna Bryndís Hilmarsdóttir, que lucía de blanco, como adelantando que es ella quien acapara gran parte de las miradas.

Oficialmente son un quinteto, pero lo de Of Monsters and Men en realidad es una pequeña orquesta: en total, son nueve músicos que se reparten guitarras (a veces cuatro sonando simultáneamente), una trompeta, un trombón, un metalófono, un teclado, un acordeón y varias percusiones, además de bajo y batería. Con esas herramientas, interpretan las canciones de sus dos discos, el exitoso My head is an animal (2011) y el más reciente Beneath the skin (2015), y aunque éste último hace algunos matices respecto de su antecesor, la fórmula no varía demasiado entre canción y canción.

12030453_10153291090490947_7972265905554988208_o

La cosa es más o menos así. Nanna Bryndís Hilmarsdóttir y Ragnar Þórhallsson, casi siempre tocando guitarras acústicas, se turnan para cantar melodías siempre compuestas. Nunca disonantes, nunca demasiado arriesgadas, deliberadamente buscan la épica con insistentes crescendos, pausas y otros trucos. La mayoría de las canciones, por ejemplo, en algún instante dejan al bombo en primer plano para marcar un pulso que de inmediato encuentra respuesta en las palmas del público. Muchas frases también se resuelven con unos cuantos uoooh, un hey o alguna exclamación equivalente, igualmente efectivas entre la audiencia. Al rato, la fórmula ya es evidente, pero aun así da resultados. Para probarlo, allí está el súper hit ‘Little talks’, que tocaron casi al final de su concierto y -como era previsible- supuso el momento de mayor euforia. Es cierto que la pequeña sección de vientos contribuye con algunos matices, pero finalmente también cae en los mismos convencionalismos.

De este modo, aunque las canciones de Of Monsters and Men suelen vincularse con mundos imaginarios y fantasías derivadas del particular exotismo que pesa sobre Islandia, en realidad son perfectas para un espacio tan masivo como Lollapalooza. En apariencia, son una puerta hacia un mundo extraño y desconocido; en realidad, son el producto de una fórmula tan exitosa como carente de algún atrevimiento.

Fotos por Jaime Carrera. Puedes revisar las postales del sábado en nuestro álbum.