Conocí a esta banda hace unos ocho años, en un programa de la Rock & Pop que se llamaba La Caverna, básicamente sobre rock británico, indie y sus derivados, y la verdad es que que no me gustó mucho lo que escuché. Años más tarde probé suerte con su quinto disco “How We Operate” y mi opinión cambió radicalmente.
Gomez tiene un sello, traducido en la variedad que han plasmado durante sus 12 años de carrera. Desde sonar a Beck, pasar por Pearl Jam y tener la pisca británica de Blur, han sabido como marcar diferencia en cada disco, todos bien recibidos por la crítica. Su debut y más reconocido "Bring It On" (1998), "Liquid Skin" (1999), "In Our Gun" (2002), "Split the Difference" (2004) y "How We Operate" (2006). Además han trascendido tanto en el mercado europeo como en las listas norteamericanas, llegando a sonar con frecuencia en algunas series de televisión.
El 31 de Marzo Gomez lanzó su sexto disco “A New Tide”, un disco tranquilo, pero punzante que continua con el buen sonido que logran en estudio. 11 canciones en 43 minutos; justa cantidad y tiempo como para no pasarse de pretencioso ni mesquino.
El sonido clásico de la banda está muy presente aun, en canciones como “If I Ask You Nicely” o el single “Airstream Driver” el lado más beck de Gomez, sonido relajado, fresco y alegre armonizado por la voz de Ian Ball. De igual forma, el otro lado de la banda en las canciones más melancólicas o rockeras cantadas por el guitarrista Ben Ottewell compensan muy bien los casi tres cuartos de hora de música. Un balance de energía al inicio, en la mitad y al final del disco que logra ir sorprendiendo canción tras canción.
Sonido pulido, coros pegotes, y los puntos más altos, en el comienzo con “Mix”, “Very Strange”, “Little Pieces” y el potente final con “Sunset Gates” hacen que este sea otro buen disco de esta banda Inglesa. Un buen punto de partida si no los conoces, y una espera que valió la pena si es que andas tras su huella.